“Por San Blas, a la cigüeña verás”, dice el refrán. Pero lo cierto es que estas aves ya pueden verse también el resto del año, como bien saben las empresas especializadas en sistemas anti aves en Valencia. Los problemas de seguridad y de salubridad provocados las cigüeñas están directamente relacionados con el cambio de sus hábitos migratorios, que han dado lugar a la superpoblación de esta especie.

Tradicionalmente, las cigüeñas de Europa han cumplido con su ancestral ruta migratoria desde África. El vuelo majestuoso y sus impresionantes nidos en los tejados de las iglesias han dotado de un halo romántico a esta especie, dando lugar a fábulas de gran arraigo popular, como la que atribuye a esta ave la misión de traer bebés humanos al mundo. Pero este relato idílico comenzó a desmoronarse cuando las cigüeñas decidieron quedarse, y de pronto se convirtieron en un problema. ¿Por qué ya no emigran las cigüeñas?

Todavía no hay una confirmación científica de que el calentamiento global esté relacionado con este cambio en los hábitos migratorios. Lo que sí está demostrado es que estas aves se han adaptado para obtener su sustento gracias a la actividad humana, especialmente en vertederos y en explotaciones agrarias como las plantaciones de arroz. La superpoblación de estas aves, concretamente en lo que se refiere al Levante español, ha traído consigo una serie de inconvenientes de salubridad y de seguridad que han propiciado la proliferación de sistemas anti aves en Valencia.

Además de los problemas de salud provocados por los excrementos, los nidos de cigüeña pueden causar hundimientos y destrozos en estructuras arquitectónicas antiguas, muchas de ellas con gran valor artístico, como son los campanarios y tejados de las iglesias. En 2001 Técnica Y Artesanía aportamos nuestra experiencia en este campo para minimizar los problemas que genera la superpoblación de esta especie.