La instalación de pararrayos en Valencia puede ser la solución a uno de los más graves fenómenos naturales que amenazan al ser humano.

Y es que la caída de un rayo puede ser devastadora, es capaz de destrozar árboles y otros objetos y de producir lesiones importantes sobre las personas que los captan, que pueden sufrir quemaduras, cataratas, trastornos psicológicos e incluso la muerte.

Aunque la región más amenazada por este fenómeno meteorológico es la República del Congo, es importante la instalación de pararrayos en Valencia, ya que no estamos exentos de su amenaza.

De media, un total de 16-17 millones de tormentas se producen al año en todo el planeta. Es decir, unas 44 000 tormentas al día, y estas pueden ocasionar rayos. De hecho, unos 100 rayos golpean la superficie terrestre por segundo.

Pero ¿cómo se origina este fenómeno?

Para que caiga un rayo, el contexto debe ser el de una tormenta.

Las nubes de tipo tormentoso, que se conocen con el nombre de cumulonimbus, contienen partículas de hielo con distinta carga eléctrica. Unas con voltaje positivo (protones), que se originan en la parte superior, y otras con carga negativa (electrones), en la zona inferior. Puesto que los polos opuestos se atraen, estas colisionan entre sí creando un campo magnético y produciendo una disociación entre estas partículas.

El resultado de estos choques son estos rayos. Es decir, los rayos son descargas naturales que se producen por la interacción de partículas de diferente potencial.

Estas descargas pueden producirse entre dos nubes o entre una nube y la capa terrestre. Estas son las que más daños pueden ocasionar al ser humano, ya que son las que nos afectan directamente.

En 2001 Técnica Y Artesanía queremos mostrarte cómo se origina este fenómeno atmosférico y dejar patente las graves consecuencias que puede ocasionar.